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HNO. SILVIO STARACE

Nombre Civil: Silvio Starace.

Fecha de Nacimiento: 13/10/1923.

Lugar de Nacimiento: Capodistria, (Koper) — Provincia de Trieste — Italia.

Fecha de Profesión: 02/02/1942.

Fecha de Defunsión: 06/10/2014.

Silvio Starace
Estable 1923 – 2014.
Nacimiento: 13/10/1923 — Capodistria, (Koper) — Provincia de Trieste — Italia.
29/11/1935: Ingresó al Juniorado de Gassino.
26/02/1939: Llega a la República Argentina.
29/02/1940: Ingresa al Noviciado de Luján.
02/02/1941: Toma de Hábito.
02/02/1942: Primera Profesión.
02/02/1947: Profesión Perpetua.
Fallecimiento: +06/10/2014 — Luján — 90 Años de edad y 72 Años de Vida Marista.

Nuestro Hermano Silvio nació en Capodistria, (Koper), Provincia de Trieste, Italia, el 13 de octubre de 1923. Junto a sus padres José y Ana compartió la vida familiar y su primera infancia con sus hermanas Gilda y Giovanna.
Ingresó al Juniorado de Gassino el 29 de noviembre de 1935. Llega a la República Argentina, con 16 años de edad, el 26 de febrero de 1939 donde continúa su formación. Ingresa al Noviciado de Luján el 29 de febrero de 1940 y recibe el hábito marista el 2 de febrero de 1941. El 2 de febrero de 1942 realiza su Primera Profesión Religiosa. Cinco años después, el 2 de febrero de 1947, realiza el gesto definitivo de su entrega al Señor como Hermanito de María, celebrando su Profesión Perpetua.

En su trayectoria marista pasó por distintos servicios y obras. Fue docente en los Colegios: Peralta Ramos de Mar del Plata (1945), Manuel Belgrano (1946-1949), La Inmaculada (1950-1953), Mons. Rasore de La Plata (1954)… Fue celador y profesor en el Colegio Nuestra Señora de Luján (1956-1959), y profesor en el Colegio San José de Morón (1960). Más tarde se desempeñó como profesor y encargado del Campo de Deportes del Colegio Manuel Belgrano de Buenos Aires (1965-1988). En este período, debido a una afección de cadera, estuvo muchos años (1970 a 1990) sin poder movilizar bien sus piernas y caminaba ayudado por dos muletas. A pesar de esto, siguió con sus tareas habituales, dando clases, manejando la camioneta, ocupándose del Campo de Deportes y de la instrucción en remo. Habiendo vencido el temor, acepta la intervención quirúrgica de la cadera y, luego de varios meses de convalecencia en Luján (año 1989), recupera la movilidad normal de sus piernas.

A partir del año 1991, debido a su buen manejo de varios idiomas (español, italiano, inglés, francés y esloveno) se desempeña como recepcionista de la Casa General en Roma. En 1994, al regresar a la Provincia Río de la Plata, vuelve al Colegio Manuel Belgrano despeñándose nuevamente como encargado del Campo de Deportes y ayudante de Administración. Fue recepcionista de la Casa Provincial (Casa de la Sagrada Familia) desde 1996 a 2000. En el año 2001 pasa a integrar la comunidad de la Residencia de Hermanos mayores, en Luján.

Fue un excelente profesor de inglés, latín, dibujo y pintura. Pero su interés y pasión no eran siempre correspondidos por sus alumnos. Más de una vez expresaba su enojo por esta situación. Fue también un asiduo lector del periódico y de divulgaciones de actualidad religiosa y cultural, particularmente del National Geographic, cuyas publicaciones leía de inicio a fin.
Durante los años que estuvo encargado del Campo de deportes del Colegio Belgrano, trabajó duramente para nivelar el terreno y elevarlo para evitar las inundaciones del río Reconquista. En ese lugar era centro de simpatía de los padres y exalumnos, pues lograba la admiración de la gente por el uso de las muletas. Era un poco mandamás, pues sin moverse mucho disponía y ordenaba levantando una muleta.

El Hno. Silvio fue un hombre de carácter fuerte, enérgico e impulsivo, pero con la humildad suficiente para reconocer hasta las lágrimas estas salidas estentóreas de su fogoso talante. No obstante, fue un hermano de gran corazón, servicial y atento. Se mostró siempre como un devoto apasionado de la Madre de Dios y del Santo Rosario. Él mismo diseñó y talló la imagen de Nuestra Señora de Carupá (representada de pie en un bote) que se venera en la parroquia homónima. Durante sus últimos años vivió con angustia la paulatina pérdida de memoria, pero no quiso olvidar el Rosario y el Avemaría. Difusor de los mensajes de Nuestra Señora de la Paz de Medjugorge y entusiasta de esta advocación, su vida interior se nutría de una profunda piedad mariana.

En la Residencia Champagnat, durante los últimos meses, su organismo se fue deteriorando paulatinamente. No logró recuperarse de una neumonía y el debilitamiento lo condujo a un paro cardiorespiratorio. Hacía tiempo que venía ofrendando al Señor la cruz de su sufrimiento.

Querido Silvio:
Descansa en paz por siempre, junto a María, la Buena Madre, a quien tanto amaste durante tu vida consagrada. Que la dulce compañía de Ella, de San Marcelino y de todos los santos maristas llenen tu corazón de felicidad sin fin. Intercede por nosotros, por nuestra Provincia, para que seamos fieles a nuestra vocación marista ante el desafío de generar un nuevo comienzo para el Instituto. Ayúdanos a ser presencia de Jesús para los niños y jóvenes más pobres, y a cultivar una espiritualidad mariana que se nutra de la vida cotidiana. Adiós, hasta que nos reencontremos en el Cielo! Hno. Joaquín Baron, Secretario PROVINCIA CRUZ DEL SUR — Hno. Horacio Bustos, Provincial…

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