Nombre Civil: Pierre Jean Achille Boyer.
Fecha de Nacimiento: 17/01/1895.
Lugar de Nacimiento: Gap — Capital del Departamento De Los Altos Alpes — Francia.
Fecha de Profesión: 20/05/1911.
Fecha de Defunsión: 02/11/1916.
Profeso Temporal 1895 – 1916.
Nacimiento: 17/01/1895 — Gap — Capital del Departamento De Los Altos Alpes — Francia.
1908: Llega a Buenos Aires. Es del primer grupo de juniores de Monctoví que se nos envía.
A mediados de 1909: Inicia el Postulantado.
19/03/1910: Toma de Hábito.
1911: Primera Profesión.
Actuó en la Casa Provincial y Colegio Nuestra Señora De Luján.
1914: Retorna a filas en Francia.
Fallecimiento: +02/11/1916 — En Acción De Guerra — 21 Años.
Pierre Jean Achille Boyer, nació el 17 de enero de 1895 en Gap, Capital del Departamento De Los Altos Alpes. Pertenece al grupo de primeros juniores que el Juniorado de Mondovi envió a nuestra Provincia, 1908. Durante su infancia, visitó con frecuencia a la Virgen en su santuario de Ntra. Señora du Laús.
Hizo el noviciado en 1910, y alcanzó a trabajar solamente en la Casa Provincial y en el C. de Luján. Estando de profesor en éste, como menor de edad, debió obedecer a sus padres, quienes le transmitieron la convocatoria de incorporarse a filas en el ejército. Fue así como, en 1914, retormó a Europa.
Fueron notables sus cartas a los cohermanos de Luján, Villa y colegio, manifestando su total adhesión a su vocación religiosa, con el deseo de tomar a vivirla en Argentina. Por sus cartas, sabemos que hizo el sacrificio de su vida por Dios, por su patria, sus parientes y hermanos, con aceptación de la muerte cuando fuera del agrado de Dios (16.12.1914); que quiere obrar por la gloria de Dios, que ama su divina presencia en todo lugar, que desea ser puro y amarlo con toda su alma y obrar por su gloria (3.1.1916).
En una de las últimas dice, luego de referirse al barro infecto de la trinchera: “Que nunca este otro fango, aquél que mancha el alma, no me toque ni de lejos ni de cerca; más bien el sufrimiento, el martirio, la muerte… No, este fango pernicioso e inmundo, mi alma no lo conocerá nunca.”
Falleció en acción de guerra Herido de bala, murió días después, el 2 de noviembre de 1916, en el Hôtel Dieu de Beauvais. Ametralladorista en el 3er. Regimiento de Infantería, estuvo 17 meses en campaña. Murió como Marista y pudo recibir los Santos Sacramentos concientemente.
De sus notas personales en el frente: “Oh, Dios mío, infinitamente poderoso y bueno, cómo me apena el ver blasfemado vuestro Santo Nombre, perdonadles, Señor, no saben lo que hacen, no han tenido tal vez la dicha de conoceros. Atraed hacia Vos a esos pobres infelices; apartadlos del fango de los placeres sensuales.”
La Famille, en su nº 4, y páginas 124 – 127. Original en francés, lo pasamos al castellano.
“Recuerdo del Hno. Pablo José, muerto en la guerra. El 2 de noviembre nos ha hecho recordar el 3er. aniversario del deceso de nuestro siempre bien recordado Hno. Pablo José. Después de su muerte, su hermano eclesiástico se ha impuesto el piadoso deber de enviar al querido Hno. Visitador un extracto de su libreta de notas íntimas del caro difunto, el que “LA FAMILIA” se propone publicar para edificación de todos. Iniciamos reproduciendo el contenido de la estampa recuerdo que los padres del extrañado desaparecido han hecho imprimir.”
Extractos De Su Libreta De Notas.
Hago a Dios el sacrificio de mi vida por mi Patria, mis padres y mis hermanos. Entrego mi alma, Dios mío, en tus divinas manos, envíame la muerte cuando te plazca.
16 De Diciembre/1914.
—“Dios mío, amor mío, hazme fuerte, haz de mí un santo, trabájame. Quiero trabajar por tu gloria. Amor mío, yo te amo. Amor adorado. Quiero ser puro, no amar más que a Ti, solamente. Te amo ardientemente, mi amor adorado. 3 de enero 1916.”
—“El tiempo se desliza, corre siempre, pasa como un torrente. Después tú, Mi Dios, la Eternidad. Allá, amaré el objeto de mis deseos. Allá, mi alma encontrará a Aquél que necesita… Oh Dios, Señor del tiempo, permite que yo viva todavía… Permíteme hacer el bien, ganar almas y enriquecer la mía, quiero trabajar por tu gloria. Pero, si Tú me quieres allá en lo alto, si tu quieres mi sangre, te la ofrezco, soy totalmente tuyo, oh mi vida, mi Todo, mi único amor. 30 de enero 1916.”
—Su recuerdo será imperecedero porque la bondad de su corazón y su amor por el deber le han valido numerosos amigos. (San Agustín).
Dichosos los corazones puros porque verán a Dios. Recordad en vuestras plegarias a Pierre Achille BOYER. De la Congregación de los Hermanos Maristas en Buenos Aires Metrallista en el 3º de infantería, fallecido el 2 de noviembre 1916 en el Hospital de Beauvais a la edad de 21 años. Muy corta ha sido su carrera, pero sus días han sido plenos. Regina Virginum Ora pro nobis.
El Hermano Pablo José oyó muy joven el llamado de Nuestro Señor. Dejó su familia a la edad de 12 años para ingresar en la congregación de los Hermanos Maristas en Buenos Aires. Sus superiores se muestran unánimes al exaltar sus virtudes.
“En nuestro Juniorado de Mondoví, donde entró en la flor de la edad, se mostró siempre el modelo de sus fervorosos condiscípulos; hizo su Noviciado con admirable fervor. Lleno de piedad, modelo de docilidad, de constancia en el trabajo, avanzaba rápidamente en la adquisición de las virtudes de su estado. Su debut como profesor permitía abrigar las más bellas esperanzas.”
Estalla la terrible guerra, él se arranca de sus queridos alumnos y durante 17 meses de ininterrumpida campaña, fue de aquéllos que saben sacrificarse y que jamás negocian tratándose de la propia inmolación.
En su correspondencia se sentía que, bajo el capote del soldado, latía un corazón de cristiano, un corazón de buen Francés.
Amó a Dios y a las almas. Amó a su familia y a su patria. Amó a su querido distrito argentino…
La Famille, número de 1920, pág. 148 – 149. El título con su ilustración son del original.
“Reflexiones que inspira a nuestro querido cohermano la vida tan triste y tan penosa de las trincheras.”
“Estoy cubierto de barro de los pies a la cabeza. Barro sagrado, barro glorioso que me honra sin duda, pero que no deja de ser infecto. ¡Oh!, que jamás este otro barro, el que mancha el alma, no me toque ni de lejos ni de cerca. Antes bien el sufrimiento, el martirio, la muerte. No, barro pernicioso, mi alma no te conocerá nunca.”
“Extrema pena que siente nuestro joven soldado al ver ofender al buen Dios y perderse las almas.” “Oh Dios infinitamente poderoso y bueno, de quien oigo blasfemar el nombre temible, perdónalos Señor, no saben lo que hacen. No tienen la dicha de conocerte… En cuanto a mí, oh Dios mío, yo te amo con todo mi corazón. Atrae hacia ti a esos pobres desdichados, dales el disgusto del barro de los placeres.”
“La perspectiva de los sufrimientos físicos y morales lo lleva a recurrir a Dios con toda confianza.” “Nieva, la campaña de invierno ha comenzado. Héla aquí con la lluvia, la nieve, el barro, el frío, las enfermedades que trae consigo. Dios mío, dame corage, siempre coraje hasta la paz, y que ella no esté demasiado alejada. Cuántas dificultades para conservarse puro y casto. ¡Oh Dios mío! ¡Oh Dios mío! hazme prudente como la serpiente y sencillo como la paloma. ¡Oh Dios mío! hazme fuerte, hazme valiente, valeroso. Todo por tu mayor amor y gloria.
¿A quién podría amar si no es a Ti, Dios mío?, quiero amarte con toda mi alma. Quiero ser íntegramente tuyo.”
“Nuestro querido Hermano Pablo se queja de su gran soledad y de la gran dificultad en encontrar un amigo verdadero.” “Aquí estoy en la trinchera, en presencia del enemigo. Nunca he sentido un aburrimiento parecido. Esta vida es soberanamente monótona, sobre todo porque no puedo encontrar un buen amigo con quien yo pueda contar. Nadie que tenga mis gustos. Me falta un amigo; sin un amigo virtuoso no se puede vivir.”
“En medio de sus mortales angustias, el pensamiento del cielo surgía para reanimar todo su ardor.” “¡Oh vida llena de miserias y angustias! ¡Oh vida llena de enigmas y ensombrecimiento! Pero, ¿por qué desanimarme? Pronto llegará la vida eterna, vida plena de inefables delicias. Qué placer para mí pensar en el Cielo. Allí no habrá más lágrimas, más suspiros, todo deseo será realidad.”
¡Oh bello Cielo por ti suspiro! Sólo a ti quiero, sólo tú me bastas.”
“Oh mi muy querido Hno. Pablo José, todos aquí en este querido distrito participamos de sus ardientes deseos, todos nosotros ambicionamos estar reunidos en torno al trono de nuestro Rey Jesús. Ruegue a la augusta María que ninguno de nosotros sea privado de las delicias eternas, por las que su corazón suspiraba con tanta vehemencia.”
Es el santuario de Ntra. Sra. de Laús, Francia, frecuentemente visitado por él durante su infancia. A izquierda, capilla de la Preciosa Sangre. A derecha se lee: “Pieza de la Hermana Benedicta.” En LA FAMILLE no se encuentra ninguna referencia que nos ilustre sobre tal santuario. De paisaje montañoso, lo vemos por el dibujo, recordemos que el Hermano había nacido en Gap, capital del Departamento de los Altos Alpes. Pablo José integró el primer grupo de juniores que Mondoví envió a nuestro Distrito, 1908.