Nombre Civil: Tomás Macken.
Fecha de Nacimiento: 31/07/1894.
Lugar de Nacimiento: Capilla del Señor — Buenos Aires — Argentina.
Fecha de Profesión: 08/12/1912.
Fecha de Defunsión: 10/03/1950.
Profeso Perpetuo 1894 – 1950.
Nacimiento: Capilla del Señor. 31/ 7/1894.
25/3/1911: Postulante.
8/12/1912: 1ra. Profesión.
1/ 1/1918: Votos perpetuos.
Actuación: 11 lugares.
Obediencias: 15 cambios.
Mayores Permanencias: 7 años Celador en Capilla del Señor; 5 a. Prof. en San Rafael.
Enero/ 1950: Internación en el Hospital Británico.
Abril: Grave intervención quirúrgica.
Últimos Sacramentos.
+ 10/ 3/1950 56 Años.
Tomás Macken era oriundo de Capilla del Señor. De acuerdo a la ficha de Secretaría Provincial, su padre, Santiago, había sido pastor en su Irlanda natal. “A cargo del cuidado de ganado”, explica el Hno. Guillermo Howlin. Su madre, Francisca Robinson, también era irlandesa.
Ingresó al Postulantado el 25 de marzo de 1911. Prosiguió sus etapas de formación y emisión de votos, teniendo lugar su profesión perpetua el 1 de enero de 1918.
Fue un buen músico, y donde se ponía a mano un órgano, lo hacía lucir. No era recurrente esta circunstancia, pero sí que frecuentaba pianos y armonios según las necesidades de lugares y/o alumnos.
De acuerdo a la ficha, podemos seguir paso a paso sus lugares de apostolado y los años correspondientes. Veamos: Unos meses de verano como Escolástico. Profesor en el Inst. Fahy/1913 -’14; C.M. Belgrano/1915 – ‘16; Celador en C. Sgdo. Corazón (M.J.) / 1917; Celador I. Fahy/1918-’24; Prof. C.Belgrano/1925; M.del Plata/1926; I. Fahy (Capilla)Celador/ 1927-’29; Moreno, 1930-’32; Morón, profesor/1933-’36; Jáuregui, profesor/1937-’39; Morón/1940, marzo a junio; Anizacate, tareas manuales/1940-’1943; San Rafael, profesor /1944 a junio 1949; Villa Champagnat/junio ‘49.
A fines de enero de 1950 es internado en el Hospital Británico. Debía ser operado, con real riesgo. Atendido por el Capellán, recibe los Sacramentos propios de la situación. Fallece el 10 de marzo de 1950, AÑO SANTO para la Iglesia y SANMARTINIANO para la República Argentina. Tenía 56 años y 31 de profeso perpetuo.
El mismo día de su fallecimiento, sus restos fueron trasladados a Villa San José para el velatorio y la Misa de Cuerpo Presente. A los habitualmente presentes en estas ocasiones de celebración pascual de la perseverancia de nuestros Hermanos, se añadieron Hermanos que se encontraban por motivos de exámenes.
En la capilla del nuevo Juniorado San José, que tenía sede en Capilla del Señor, tuvo lugar un funeral por su eterno descanso el 17 de abril. Además de ser oriundo de la ciudad, había sido maestro del Inst. Fahy. Asistieron a la Misa el Hno. Provincial, los HH. Veremundo y Vital, familiares del Hermano, exalumnos y miembros de la colectividad irlandesa de Buenos Aires y de la zona.
En la nota sobre su vida, encontramos una clara pincelada referida a sus características espirituales más salientes. Transcribimos el párrafo final.
“Si una virtud brilló en la vida del H. Odérico a lo largo de su existencia, mencionaremos la modestia, la discreción, el silencio, la humildad y la completa entrega a su misión educadora. No era el hombre de meterse en honduras ni amigo de ocuparse de las actividades ajenas. Su misma muerte que sorprendió por lo inesperada, pues había pedido que no se divulgara lo de su internación en el hospital, por lo que sólo se supo la gravedad de su mal apenas una semana no más del desenlace final, es fiel reflejo de lo que fue su vida: un acto de humildad, de modestia, de voluntad sincera de pasar inadvertido. El Señor, tan amigo de los humildes, de los silenciosos, de los que a sí mismos no se estiman ni anteponen, otorgóle, por ello sin duda, el premio inestimable de la perseverancia final, con lo que, de paso, nos alecciona poderosamente. Pidamos al Señor que del recuerdo del Hno. Odérico aprendamos tan alta y difícil lección.”
En la página 70 del nº 3, septiembre – octubre 1919, de la primera revista provincial, “La Famille”, hecha a pasta, encontramos la primera de las dos referencias halladas sobre él. Se trata de la visita a Capilla del Señor realizada por el Dr. Camilo Crotto, gobernador de la provincia de Buenos Aires. Fue el día 14 de septiembre Copiamos : “El digno representante de la provincia de Buenos Aires venía en vagón especial, acompañado de una quincena de altos personajes que formaban su guardia de honor. El batallón “Manuel Belgrano” del Instituto Fahy, de reciente creación, fue el primero en ofrecer su saludo de bienvenida al eminente visitante, quien se complació en agradecer públicamente tal acto de deferencia.
Durante el trayecto de la estación hasta la Municipalidad, la banda de música de la policía de La Plata y la nuestra, que dirige tan bien el querido Hno. Odérico, ejecutaron las más bellas piezas de circunstancia.” La banda dirigida por nuestro Hermano abrió el acto celebrado con motivo de la visita que el Señor Gobernador llevara a cabo al Instituto dirigido por los Hermanos. Ejecutó el Himno Nacional.
En las páginas 4 y 5 de Ecos de Familia, mayo 1950, encontramos la nota necrológica: “NUEVAS DEL HOGAR. + Hno. Odérico. El día 10 de marzo, algunas semanas después de sufrir una grave intervención quirúrgica, entregaba su alma a Dios el que fuera nuestro estimado Hno. Odérico. Pocos días antes había recibido piadosamente los últimos Sacramentos, que le fueron administrados por el capellán del Hospital Británico, en el que se hallaba internado desde los últimos días de enero.
El mismo día de su fallecimientos sus restos mortales fueron trasladados a Luján, para ser velados en la Casa San José. A la mañana siguiente, después de la misa de cuerpo presente, se le acompañó hasta el panteón marista del cementerio de Luján. Asistieron a sus exequias todos los moradores de la Casa San José, la comunidad del Colegio de Nuestra Señora, un grupo de Hermanos que se hallaba de paso por Luján en ocasión de sus exámenes y algunas delegaciones de Hermanos de las Comunidades cercanas.
Si una virtud brilló en la vida del H. Odérico a lo largo de toda su existencia, digamos que ella fue la modestia, la discreción, el silencio, la humildad y la recatada entrega al propio menester. No era el hombre de meterse en honduras ni amigo de inmiscuirse en las actividades ajenas. Su misma muerte, que sorprendió doquiera por lo inesperada, pues había pedido que no se divulgara lo de su internación en el hospital, por lo que sólo se supo de la gravedad de su mal apenas una semana no más antes del triste desenlace final, es así fiel y exacto reflejo de lo que fue su vida: un acto de humildad, de modestia, de voluntad sincera de pasar inadvertido.
El Señor, tan amigo de los humildes, de los silenciosos, de los que a sí mismos no se estiman ni se anteponen, le otorgó, por ello sin duda, el premio inestimable de la perseverancia final, con lo que, de paso, nos alecciona poderosamente. Pidamos al Señor que del recordado Hno. Odérico aprendamos tan alta y difícil lección.
El día 17 de abril en la capilla del nuevo Juniorato San José, el Hno. Odérico, nativo de Capilla del Señor, había sido alumno y maestro en el viejo Instituto Fahy, se celebró un funeral por su eterno descanso, al que asistieron, además del Hno. Provincial y de los RR.HH Veremundo y Vital, los familiares del difunto, exalumnos y miembros de la colectividad irlandesa de Buenos Aires y de la zona.”
En el mismo número, en página 8 leemos: “De los corresponsales. San Rafael. El 12 de marzo se celebró la santa misa en nuestra capilla por el eterno descanso del recordado Hno. Odérico. Asistieron a la misma varios amigos del Colegio, conocedores del fallecimiento del Hermano. Los alumnos asistieron a una misa celebrada con la misma intención el día 15 en la parroquia de Ntra. Sra. de Lourdes.”